-
Contenido
122 -
Registrado
-
Días Ganados
10
Todo el contenido de Parmellano
-
Debo devolver la espada a su pedestal...
Parmellano ha respondido al tema de Rocco en Preséntate o Despídete
='( Es una lástima macho, me lo pasaba dpm contigo y tus pjs. Espero que tu situación se estabilice en poco tiempo, y esto algún día sea una historieta que contemos con calma. -
Big Fish. Tremenda. La mejor de Tim Burton con diferencia. ¿Hierro Negro o Martillo Salvaje?
-
-
Capítulo 3: Desterrar - Severus, por fin. Me alegra que hayas vuelto - Exclamó Turbino, en el instante en el que vio la figura del brujo entrar ala habitación donde se encontraba leyendo -. Muestra a este viejo gnomo tus regalos. Con un aire acongojado, Severus miró las togas oscuras que su maestro solía llevar cuando se encontraba en las instalaciones del Aquelarre. Si bien es verdad que un gnomo no tiende a inspirar temor en una situación normal, las posibles consecuencias de la próxima conversación eran suficientes para hacer que se doblase de miedo. Su maestro le hab
-
Nadie deja el rol. No ha nacido quién. Mucha suerte en tus siguientes aventuras, figura. Espero que vuelvas y nos sigamos echando unas risas con Alejandro
-
Staff El Retorno del Emperador y una ración de galletas
Parmellano ha respondido al tema de Kyrie Eleison en Noticias MundoWarcraft
¡Ha vuelto! ¡Hail Palpatine, viva el Lado Oscuro! *nota como las fuerzas de la Luz sacan los grilletes, y comienza a tartamudear* Digo... ¡Fiesta de Luz! -
Capítulo 2: Liberar - Severus, hoy no trabajas, ¿eh? Me dan ganas de sonreír por saber que esta tarde el local no apestará a chucho. A pesar de ser su día de descanso, como Severus vivía en los cuartos del taller, se veía obligado a seguir viendo a todos sus compañeros de trabajo. Sospechaba que Turbino había diseñado el taller de esa forma para forzar a los trabajadores a mirar como se iban a pasarlo bien aquellos que no trabajasen ese día. Pero no parecía importarle, pues disfrutaba viendo las miradas de envidia de sus compañeros. Al menos, lo mismo que disfrutaban los demá
-
Capítulo 11: El regreso - Luz bendita, qué calor. Dos meses, ni más ni menos. Ese había sido el tiempo que Nicholas había pasado desaparecido desde que, según historias de los pueblerinos de Villadorada que pudieran conocerlo, se marchó de allí con un chichón en la cabeza y refunfuñando. Poco o nada se sabía de él desde entonces. ¿Qué historias habrá vivido? ¿Qué lugares visitó? ¿Cuántas hordas de enemigos habrán perecido bajo el poder de sus hechiz... Bueno. ¿Cuántos nuevos amigos habrá tenido que hacer para que le ayudasen a cumplir los encargos de aquellas zonas? Siempre pa
-
Capítulo 10: El golpe - Últimamente has progresado mucho, mi aprendiz. Nicholas salió del círculo de entrenamiento, con una clara sonrisa de satisfacción. En aquella sesión de entrenamiento, Sardino, el asistente de su maestro, había colocado en la pared opuesta a la mesa del despacho una diana. Tulnaimo le había hecho introducirse como otras veces en el círculo, y le había dicho que no debía abandonarlo hasta que uno de sus misiles arcanos impactase contra el centro de la diana. Esta vez, casi sin esfuerzo, acertó de lleno al primer intento. Conjuró un misil arcano, usando ni
-
Capítulo 1: Renacer El taller conocido como "Rayos y re-tuerca-nos" no gozaba de mucho prestigio dentro del Barrio de los Enanos aún. Trasladados desde Forjaz, apenas llevaba abierto un año, y si bien es verdad que los clientes quedaban satisfechos, no eran demasiados los que entraban todavía. El establecimiento parecía el típico taller gnómico, lleno de artilugios con usos dispares, herramientas esparcidas por el suelo, y manchas de grasa y suciedad. Estaba regentado por un pequeño gnomo inquieto, el maestro ingeniero Turbino, quien andaba siempre de un lado a otro, apretando tuer
-
Introducción En el siguiente post iré colgando trozos de roles acontecidos desde el punto de vista de mi personaje Severus Palazzo, referentes a su estancia en las divisiones cobre y bronce. Se agradecen las críticas que puedan tener, tanto buenas como malas. Disfruten de la lectura.
-
Capítulo 9: El estudio - ¿Qué narices estoy haciendo con mi vida...? La misma frase de siempre. Allá estaba Parmellano, tumbado en su habitación, mirando otro libro de la biblioteca más. Las clases parecían poco a poco dar sus frutos, pues ya era capaz de conjurar algo de magia siempre que lo requería. Precisamente estaba muy orgulloso de la pequeña llama arcana que acudía a su mano siempre que lo desease. Y, sin embargo, no parecía feliz. Cuanto más sabía de magia, más conjuros quería aprender. Ahora su maestro parecía interesado en la idea de que usase la magia de forma ofen
-
Capítulo 8: La batalla - No era el momento más indicado para sacar conclusiones. Nicholas volvía a la pequeña posada de Villadorada. Lejos de descansar, había acordado una reunión con sus cuatro trabajadores para evaluar la situación económica de la empresa. El pequeño negocio de carritos de hierbas parecía poco a poco dar sus frutos, así que decidieron cenar todos juntos para estrechar lazos. A pesar de las distintas regiones, todos los trabajadores compartían una situación económica y social parecida, y todos habían sido ayudados por Parmellano en algún momento de sus aventu
-
Capítulo 7: El portal - ¿Qué tendrá que ver la sangrerregia con un portal? Los enemigos acechaban en cada camino de las Tierras Altas de Arathi. El humor de los strómicos era pésimo. Sin embargo, había algo en esa tierra que Nicholas adoraba, y aún desconocía que era. Por mucho que lo pensaba, no podía imaginar que era lo que tanto le agradaba de aquella tierra, pero lo hacía. Cuanto más tiempo pasaba allí, más ágil se sentía. Más alegre se levantaba, y mejor se encontraba. Incluso había comenzado a pensar que era porque su sangre reconocía el lugar en el que estaba, y eso le
-
Capítulo 6: El entrenamiento - ¿Quién hubiera dicho que esto sería tan divertido? Los días en Stromgarde habían cambiado de forma drástica. De pasar las horas muertas en el Refugio de la Zaga leyendo y dibujando, esperando el momento de que alguno de sus amigos terminase la guardia, últimamente se habían vuelto un poco más movidos. Y es que las palabras de su abuelo Magnus habían sido decisivas: "Vuelve a proponerme defender el linaje de mi familia cuando seas capaz de blandir un arma o usar la magia". Despertaba pronto por la mañana, y junto a varios milicianos entrenaba
-
Luz bendita, estás echa una artista
-
Capítulo 5: La bondad Faltaban pocos días para que Parmellano se dirigiera a Stromgarde. No solamente había prometido ir, sino que además había encontrado un encargo que bien podría pagarle el plazo de la matrícula del mes, por lo que su viaje a aquellas tierras se estaba volviendo cada vez más real. Sin embargo, necesitaba algo de dinero extra para poder invertir en la empresa de hierbas. A fin de cuentas, pensó, si la arriesgada operación salía bien y los trabajadores se ganaban su sueldo, llegaría un momento en el que no necesitaría hacer encargos para poder hacer frente a las f
-
Capítulo 4: La clase Parmellano se adentró en el despacho de su mago, Xemal Tulnaimo, como tantas otras veces había hecho. El despacho era bastante grande, dotado de artefactos de todo tipo, fruto de años y años de investigación. Sin embargo, en la sala quedaba espacio para un espacio lo suficientemente grande para realizar los movimientos de cualquier hechizo, y una mesa de buena madera, donde el maestro realizaba varias anotaciones en su grimorio, acompañado de un mago abjurador llamado Sardino. Este mago llamaba particularmente la atención a Parmellano: rara vez se separaba de s
-
Felicidades Halt!!
-
Capítulo 3: El aprendiz - El lunes comenzamos las clases. Más te vale ser puntual. Por fin lo había conseguido. Tras ayudar al mago Xemal Tulnaimo, este había accedido a acogerle como aprendiz. Feliz a más no poder, Nicholas daba saltos de alegría en la habitación de su posada. No es que le agradase la idea de ser instruido por alguien en concreto, pero el mago había resultado ser muy habilidoso con sus conjuros. Pocas personas le enseñarían Transmutación mejor que él. Y pensar que si hubiera ido al norte con Valedorn y Eliott nunca hubiera tenido un maestro... Pero cla
-
Jajaja me he deslolado vivo Es un hilo cojonudo. Venga, vamos a sumarnos. Aquí se puede ver a Parmellano junto a un grupo de aventureros convenciendo a un personaje legal bueno para unirse a un encargo del tablón de anuncios.
-
Capítulo 2: Los bandidos - ¿Pero con qué lo han destrozado, con un hueso de dragón? Las noches en Páramos de Poniente, a parte de frías eran bastante intranquilas. Los mendigos se apilaban en las cercanías de Colina del Centinela, en un desesperado intento de cobijo. Los bandidos se refugiaban cerca de los caminos, o en alguna cueva para contar el botín del día y dormir con un ojo abierto, por si bandidos con menos escrúpulos decidían robarles a ellos. Y la gente de bien, se apilaba donde podía huyendo del frío y los anteriores, con la esperanza de que el día siguiente f
-
Capítulo 1: El florista - Hm... Podría haber sacado más. La noche se hacía oscura, al tiempo que el florista ajustaba bien las cadenas del carrito de flores que le daba de comer. Con paso lento, se adentró en la posada, buscando cobijo. Ese preciso instante era uno de sus momentos favoritos del día. La sensación de ser difuminado entre una marea cálida y ruidosa de borrachos chocaba sobremanera con el frío silencio del resto del día, a excepción de los pocos momentos en los que hablaba con los clientes. Los cuales, gracias a la Luz y a haberse mudado al sur, cada día
-
Introducción En el siguiente post iré colgando trozos de roles acontecidos desde el punto de vista de mi personaje Nicholas Parmellano, referentes a su estancia en las divisiones cobre y bronce. Se agradecen las críticas que puedan tener, tanto buenas como malas. Disfruten de la lectura.